La suplantación de identidad en los subsidios sociales en Colombia ha ido en aumento, dejando a muchos beneficiarios sin el apoyo que tanto necesitan. Este problema no afecta solo sus finanzas, sino también su permanencia en los programas de ayuda. Por eso, actuar rápido es clave para recuperar lo perdido y asegurar su continuidad en estos beneficios.
En este artículo le explicaremos cómo identificar un posible fraude, qué pasos seguir y cómo proteger sus datos para prevenir estas situaciones. Porque no hacer nada puede resultar en la pérdida definitiva de su subsidio.

¿Cómo detectar si alguien cobró su subsidio?
Identificar si es víctima de fraude puede ser más sencillo de lo que parece si presta atención a las señales correctas:
- Falta de pago: Si esperaba recibir el subsidio en una fecha específica y no ha cambiado sus datos bancarios o personales.
- Mensajes sospechosos: Notificaciones que le informan cambios en su cuenta o solicitan información personal desde fuentes no oficiales.
- Movimientos no autorizados: Operaciones bancarias que no reconoce o solicitudes de datos inusuales por parte de supuestos funcionarios.
Ejemplo real: En ciudades como Medellín, beneficiarios han reportado mensajes falsos de promociones en programas como Sisbén o Devolución del IVA. Estos mensajes pedían información sensible para luego sustraer sus subsidios.
¿Qué hacer si fue víctima de fraude?
Si detecta alguna irregularidad, siga estos pasos para actuar inmediatamente:
- Contacte a Prosperidad Social: Utilice únicamente los canales oficiales: correos terminados en @prosperidadsocial.gov.co, la línea 01 8000 95 1100 o el chat web del DPS.
- Denuncie el fraude: Reúna toda la evidencia como mensajes, capturas de pantalla o recibos y presente su caso ante la Fiscalía General de la Nación o la Policía Nacional.
- Solicite reversión: Aporte toda la documentación para iniciar el proceso de recuperación del subsidio. Este trámite puede tardar entre 20 y 30 días hábiles en resolverse.
Métodos modernos para proteger sus subsidios
Gracias a los avances tecnológicos, ahora es más fácil prevenir fraudes. Estas son algunas de las herramientas disponibles en 2025:
- Verificación biométrica: Muchos puntos de pago ya requieren huella digital o reconocimiento facial para validar la identidad del beneficiario.
- Doble autenticación: Las plataformas oficiales han implementado códigos de seguridad enviados a su teléfono para aprobar cada transacción.
- Alertas automáticas: Active notificaciones por SMS o app para recibir avisos instantáneos de movimientos en su cuenta.
- Capacitación digital: Participe en talleres gratuitos del DPS, diseñados para educar a los usuarios sobre cómo evitar estafas sofisticadas.
Consejos prácticos para protegerse de fraudes
La prevención es su mejor aliada. Expertos recomiendan tomar estas precauciones para proteger su subsidio:
- No comparta información personal o bancaria con desconocidos o fuera de los canales oficiales.
- Consulte regularmente su estado en las páginas oficiales de Prosperidad Social y del Sisbén.
- Participe en jornadas informativas organizadas por las alcaldías o el DPS en su comunidad.
Historias reales de recuperación
En el Meta, María G., una madre cabeza de hogar, descubrió que alguien había retirado su subsidio sin autorización. Al reportar el caso por el sitio web oficial, logró recuperar su dinero en menos de un mes y ahora capacita a sus vecinos en cómo proteger sus datos personales.
En Bogotá, colectivos barriales han conformado redes locales para verificar mensajes sospechosos, logrando una significativa disminución en fraudes.
El impacto de denunciar y actuar rápido
Denunciar el fraude no solo le ayuda a recuperar lo que perdió, sino que también garantiza su permanencia en futuros programas. Además, las entidades están cada vez más enfocadas en brindar herramientas de seguridad gratuitas a los beneficiarios.
Recuerde, su participación activa en capacitaciones y talleres es esencial para mantenerse protegido.
Si sospecha que ha sido víctima de fraude, no lo deje pasar. Actúe hoy y recupere no solo su dinero, sino su tranquilidad.